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El Rockalavera sigue haciendo historia

El Rockalavera sigue haciendo historia

Nota/Fotografia: @Ricardo
Por sexto año consecutivo Black Charros Producciones pone a bailar a la Ciudad de México al ritmo de los 50
Pese a que un día antes de realizarse el festival hubo un imprevisto cambio de sede, no fue un impedimento para que sensuales vestidos Pin-Up’s, copetes, labios rojos y chaquetas de cuero invadieron la pista. El Festival Rockalavera, en su sexta edición, tras ya no realizarse en el Bar El Cuartel, las actividades tuvieron lugar en dos complejos: el sábado en La Faena y el domingo en el Be Bop’s Diner.
Día uno.
La noche empezaba a caer en el centro de la Ciudad de México, y los que conformaban la fila ya estaban impacientes. La Faena,  la cantina más grande de la Ciudad (Venustiano Carranza 49, Centro) se preparaba para recibir a cientos de fanáticos. Tras algunos minutos de espera, las puertas se abrieron, las cervezas comenzaron a desfilar por la barra y la pista se inundó de parejas que se movían al ritmo del rockabilly.
Exponentes de todo el país, asaltaron el escenario. Un cartel conformado por bandas de ciudades de todo el país como Mérida, Cancún, Guadalajara, Monterrey y la capital; y cada una de ellas demostraron que el rockabilly es cada vez más mexicano.
Para muestra los regios de Broken Bones Rhythm Club, quienes recién llegados de la capital de Nuevo León deleitaron los oídos de los chilangos, así desde su primer acorde hicieron que nadie se quedara sentado.

Además de mucho rock and roll, también se hicieron presentes otros ritmos como el blues, swing y el surf. Éste último corrió a cargo de los Surfing Monsters, banda oriunda de Cancún, que con sus riffs transportaron a los asistentes a esas olas del sureste mexicano.  
También hubo lugar para el talento emergente, así los ganadores del pasado ‘Rockabilly Rumble’, Los Rufianes, con rolas originales y su estilo singular prendieron al público. La fiesta no paraba, y con apenas minutos para respirar porque la selección del dj set de Tony Pelayo hacía recordar aquellos clásicos de Chuck Berry, Gene Vincent, Jerry Lee Lewis que son imposibles no bailar. Así, sin importar que la noche avanzara, la fiesta no paraba.
Día dos.
Era el día del cierre del festival y las sorpresas no acababan. Un auto tuneado al estilo de los 50 estaba estacionado en Medellín 188, en la Colonia Roma, y la música que provenía del interior del Be Bop’s Diner pertenecía al cierre del Festival Rockalavera.
Las actividades iniciaron temprano en el Be Bop’s Diner. Aproximadamente a las 14 horas este local ambientado en la época de los 50 con posters de grupos de rock & roll, fotos de Marilyn Monroe y una estampa de la película Vaselina, dejaba claro que el rockabilly continuaría y el maestro de ceremonias Leon Boy, vocalista de Los Golosos, anunciaba que la música no acababa.

Más bandas se presentaron. Tanto nacionales como internaciones. Como Dawn Shipley, directo desde Los Ángeles, California con su ritmo de la vieja escuela. Asimismo, Los RIPpers, de Mérida, Yucatán con sus rostros pintados de cráneos y su psychobilly; y la banda tapatía Los Creepta Band que dio muestra del verdadero rock and roll, dejando sobre el escenario hasta la última gota de sudor.
Además de la música, el espectáculo lo hizo el público. El premio a la mejor chica pin up, donde se mostraron las mejores indumentarias, y curvas, que deleitaron las pupilas de los asistentes. Posteriormente, el concurso al hombre con la mejor barba, donde la testosterona venció. Por medio de estos concursos un par de afortunados se llevaron premios en efectivo.    
La noche estaba puesta. Tras muchas horas de baile y diversión, llego la hora de culminar el festival y Bang Bang Boogie se encargó de ello. Con sus mejores rolas, hicieron que el público se encendiera y con un palomazo del mismo Leon Boy es como pusieron punto final a esta edición del Rockalavera.

El Rockalavera Rockabilly Weekend volvió a invadir a la Ciudad de México, con el Este es el festival más grande de rockabilly de todo México y Latinoamérica. Con el ritmo que marcó a la década de 50, tanto la música como la cultura, la moda y el estilo de vida celebraron una reunión más, y ya se espera con ansias el próximo año.

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